La duración óptima que puedes estar sentado en una silla ergonómica sin afectar tu salud varía según diferentes factores, como tu edad, condición física y tipo de trabajo. Sin embargo, aquí hay algunas pautas generales: 

1. Regla de 20-20-20 

Cada 20 minutos, mira algo a 20 pies (6 metros) de distancia durante al menos 20 segundos. Esto ayuda a reducir la fatiga visual y a recordarte que debes moverte. 

2. Levántate y muévete 

Intenta levantarte y caminar al menos cada 30 a 60 minutos. Incluso breves pausas para estirarte o moverte pueden ayudar a mejorar la circulación y reducir la tensión muscular. 

3. Alternar posturas 

Si es posible, alterna entre estar sentado y de pie. Utilizar un escritorio ajustable puede ser una buena opción para facilitar esta práctica. 

4. Sentado prolongado 

Aunque las sillas ergonómicas están diseñadas para ser cómodas, estar sentado durante más de 4-6 horas continuas puede comenzar a afectar tu salud, incluso en una buena silla. Escucha a tu cuerpo y no dudes en hacer pausas. 

5. Escucha a tu cuerpo 

Presta atención a cómo te sientes. Si comienzas a experimentar molestias, es una señal de que es hora de moverte. 

Conclusión 

La clave está en la variedad y el movimiento. Combinar períodos de trabajo sentado con pausas activas te ayudará a mantenerte saludable y productivo. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!